En el material, de unos 40 segundos, aparecen cuatro uniformados
de pie frente a tres cuerpos ensangrentados y a uno se le escucha
decir: "ten un buen día, amigo".
Un subtítulo de la cinta en el sitio YouTube identifica a los
marines como parte de un equipo de francotiradores de Camp Lejeune,
con sede en la provincia de Helmand, aunque no hay confirmación de
esos datos.
Entre las reacciones, tras la difusión de las imágenes, sobresale
la del Consejo para las Relaciones Estadounidense-Islámicas (CAIR,
por sus siglas en inglés), la mayor organización musulmana para la
defensa de las libertades civiles en Estados Unidos, cuyo vocero
Ibrahim Hooper expresó a la BBC: "Es un video repugnante, inmoral".
CAIR envió una carta al secretario de Defensa de EE.UU., Leon
Panetta, en la que se reclama que los culpables sean "castigados con
todo el rigor" de la ley.
El presidente afgano, Hamid Karzai, en un comunicado, exigió a
Estados Unidos que castigue lo antes posible a sus autores que
"deshonran los cadáveres de tres afganos". "Ese acto de soldados
estadounidenses es profundamente inhumano", precisa, e insta "al
gobierno estadounidense a que investigue de inmediato la grabación".
En palabras de la parlamentaria afgana Fawzia Kofi, este video se
trata de una ofensa para todos los afganos, sin importar qué piensen
del talibán. "Es una cuestión de respeto al ser humano", manifestó a
la BBC.
Un portavoz del talibán en Afganistán dijo: "esta no es una
acción humana. Es una acción salvaje demasiado vergonzosa como para
que hablemos de ella".
Por su parte, el jefe del Penatágono se vio obligado a reconocer
que el video es "totalmente deplorable" y aseguró que quienes
participaron en el incidente serán procesados hasta las últimas
consecuencias. Por lo pronto, dos de los cuatro infantes de marina
ya han sido identificados, según BBC Mundo.