NACIONES UNIDAS, 23 diciembre.— El Consejo de Seguridad repudió
hoy los atentados ocurridos en la capital de Siria y ratificó que el
terrorismo en todas sus formas y manifestaciones constituye una
seria amenaza para la paz y seguridad internacionales.
Cualquier acto de esa naturaleza es criminal e injustificable,
sin importar sus motivaciones, ni dónde, cuándo ni por quién sea
cometido, subrayó el órgano de 15 miembros en una declaración.
El texto reitera la determinación del Consejo de Seguridad a
combatir todas las formas de terrorismo, de acuerdo con sus
responsabilidades y lo estipulado por la Carta de la ONU.
También recuerda a los Estados miembros de la organización que la
aplicación de medidas contra el terrorismo deben cumplir las
obligaciones con respecto a los derechos humanos, los refugiados y
la legislación humanitaria.
En la misma jornada, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon,
emitió un comunicado de condena a los atentados y afirmó que todo
tipo de violencia es inaceptable y debe cesar de manera inmediata.
Los atentados en Damasco dejaron 44 muertos y 166 heridos y
tuvieron por blanco la Dirección de la Seguridad Estatal y la
dependencia regional en Damasco de la Policía Militar de
Investigación.
Según las autoridades sirias, los ataques fueron obra de la red
Al-Qaeda, a partir de las características de su planificación y
ejecución, y constituyen una escalada en la violencia terrorista en
Siria por parte de los grupos takfiries desde hace más de nueve
meses.