Los agentes de seguridad de los aeropuertos franceses decidieron prolongar hoy la huelga por aumentos de salarios y mejores condiciones laborales, pese a la intervención de la policía para sustituir parcialmente sus funciones, indicó Prensa Latina.

Durante una asamblea general en las instalaciones de Roissy-Charles de Gaulle, los trabajadores acordaron mantener la protesta hasta obtener una respuesta del sector patronal.

Los efectos del paro en los últimos días se limitaron a una demora en los trámites del abordaje a los aviones y la inspección de los equipajes, pues todos los vuelos programados se han realizado.

Por esa razón, los dirigentes sindicales consideraron inapropiado el despliegue policial ordenado la víspera por el ministro francés del Interior, Claude Guéant.

El Gobierno ha escogido su campo en este conflicto y ese es el de los patronos, aseguró Bernard Thibault, de la Confederación General del Trabajo, quien calificó de ilegítima la intervención de las fuerzas del orden para neutralizar la huelga.

Por su parte, el candidato presidencial del Partido Socialista, Francois Hollande, estimó que las autoridades debieron alentar desde el principio una mediación en el conflicto.

La protesta fue convocada el viernes pasado para 24 horas, pero se extendió por la negativa de las empresas privadas que brindan el servicio de seguridad en los aeropuertos a negociar las demandas de sus empleados.