WASHINGTON, 9 de noviembre.— El gobierno de Estados Unidos confirmó
hoy que evalúa la posibilidad de aplicar "más presión" sobre Irán,
posiblemente en forma de nuevas sanciones, amparado en el informe
del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) sobre las
actividades nucleares de la nación persa, informa EFE.
El portavoz adjunto del Departamento de Estado de EE.UU., Mark
Toner, indicó que el gobierno de Obama está "barajando una serie de
opciones", aunque no dio más detalles. Francia, Alemania y el Reino
Unido también expresaron su determinación a imponer sanciones
"nuevas y fuertes" contra Irán.
En respuesta al aumento de las presiones de Occidente, el
presidente iraní Mahmud Ahmadineyad subrayó que Irán no tiene la
intención de retroceder ni un milímetro en su programa, que tiene
exclusivamente fines pacíficos.
Por su parte, Rusia y China expresaron su rechazo al aumento de
las presiones contra Teherán.
"Cualquier sanción adicional será vista por la comunidad
internacional como un instrumento para el cambio de régimen en Irán.
Esa perspectiva es inaceptable para nosotros", declaró el
viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Gennady Gatilov, mientras
el Ministerio de Exteriores chino advirtió que una acción militar
contra Irán puede causar inestabilidad y conflictos en Oriente
Próximo.
No obstante, el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Guido
Westerwelle, opinó que los europeos deben actuar por su cuenta si
China y Rusia, como se espera, se oponen a las sanciones en el
Consejo de Seguridad de la ONU, refiere PL.