La Asamblea Legislativa de El Salvador decretó estado de
calamidad pública y desastre en los tres departamentos más afectados
por las intensas lluvias iniciadas el pasado lunes.
La iniciativa, que logró los votos de 67 de los 84 diputados,
permitirá al gobierno agilizar el movimiento de fondos y otros
recursos para atender a los damnificados y recuperar los daños.
Los últimos datos de la Comisión Nacional de Protección Civil
indican que los albergados superan los cuatro mil 300, mientras
están previstas nuevas evacuaciones preventivas de comunidades
inundadas.
El departamento de Ahuachapán, en el occidente y fronterizo con
Guatemala, se encuentran las zonas más afectadas por el
desbordamiento del río Paz, que ha invadido extensas aéreas.
Uno de sus municipios, San Francisco Menéndez, se encuentra desde
hace tres días en alerta roja debido al impacto de las intensas
precipitaciones.
En el oriental Usulután, el río Lempa ha inundado extensas zonas
próximas a su desembocadura, situación que se agrava por las
descargas de las represas de las hidroeléctricas, al tope de su
capacidad.
Los daños son también considerables en el central La Paz, el
tercer departamento puesto en estado de calamidad, apuntó Prensa
Latina.
Las lluvias de la actual temporada se incrementaron a partir del
lunes asociadas a una depresión tropical que se mantuvo casi
estacionaria en el sureste de Guatemala.
Aunque el fenómeno se alejó hacia México, sus remantes
continuarán afectando a la nación durante este fin de semana, de
acuerdo con los pronósticos.
Esta mañana, la capital amaneció bajo un cielo plomizo, similar
al de los últimos cinco días, y al cierre de esta nota (08:00 horas,
14:00 UTC), cae un denso aguacero tras horas de una constante y
gruesa llovizna.