CHITRÉ, Panamá, 2 octubre.— Con impresionante despliegue ofensivo y magnífico trabajo del derecho Freddy Asiel Álvarez, Cuba noqueó hoy 10-0 a Australia en su debut en la XXXIX Copa Mundial de béisbol, disputada aquí en el estadio Rico Cedeño.

Los antillanos superaron con nota sobresaliente su primer trámite del torneo, al compilar 16 hits entre ellos par de dobletes y cuatro jonrones.

Esta descomunal ofensiva estuvo calzada con el brillante trabajo del derecho Freddy Asiel Álvarez, quien asumió brillantemente su función de líder del staff con un trabajo de seis entradas completas, en las que permitió solo tres sencillos y recetó cuatro ponches.

Cuba salió delante en el marcador desde el mismo capítulo inicial, gracias a un soberano cuadrangular por la pradera derecha del designado Frederich Cepeda con Héctor Olivera en circulación (se embasó por error del torpedero).

Le di a una recta pegada (de 91 millas), saqué bien los brazos y, aunque la pelota se elevó bastante, se fue fácil del parque, dijo Cepeda en exclusiva con Prensa Latina, solo minutos después de disparar el vuelacercas.

Dos entradas más tarde, en la cuarta, los cubanos sentenciaron el desafío al fabricar enorme rally de seis carreras, coronado primero por jonrón con bases llenas del paracortos Erisbel Arruebarruena -supuestamente el bateador más débil de toda la plantilla-, y luego por kilométrico bambinazo de dos carreras del camarero Héctor Olivera, a lo profundo de los jardines izquierdo y central.

Esta producción ofensiva propició la explosión del abridor australiano Dushan Ruzic (derecho de seis pies y ocho pulgadas de estatura), quien había lanzado una joya de pitcheo ante Cuba hace dos años en la Copa Mundial Europa-2009.

En el quinto episodio, ante el primer relevista de los aussies, el derecho Hayden Beard, la selección antillana puso el marcador de nocao 10-0, al ligar otras dos anotaciones por cuadrangular del antesalista Yulieski Gourriel, de línea por encima de la barda del jardín izquierdo.

Cuba tuvo tiempo todavía para marcar cuatro anotaciones más en el séptimo inning, buenas para decretar el fuera de combate final con marcador 14-0.

El mejor bateador del partido fue Arruebarruena, quien registró sencillo y jonrón en tres veces al bate, con cuatro impulsadas y dos anotadas.

También sobresalieron por los ganadores Héctor Olivera (doble y vuelacercas, dos impulsadas e igual cantidad de anotadas), Frederich Cepeda (jonrón), Alfredo Despaigne (sencillo y doblete, una carrera anotada), y Yulieski Gourriel (sencillo, bambinazo, dos remolques y una anotada).

En Copas del Mundo, esta fue la sexta victoria del equipo cubano ante Australia. Por mucho, esta fue la más holgada de todas.