LA PAZ. — El gobierno boliviano rechazó hoy de forma categórica 
			el informe del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al 
			Congreso en el que afirma que el país suramericano ha fallado en su 
			lucha antinarcóticos.
			En declaraciones a la prensa a las puertas de Palacio Quemado, el 
			viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César 
			Navarro, recordó que ese enfrentamiento es más efectivo ahora sin la 
			Agencia Antidrogas del norteño país (DEA) expulsada en 2008.
			Navarro señaló además que en el caso de la erradicación de los 
			cultivos excedentes de hojas de coca se trata de un proceso que 
			ahora respeta los derechos humanos y realiza sin violencia, en 
			consenso con los productores de la milenaria planta.
			Estadísticas oficiales señalan que entre 2006 y 2008, con la DEA, 
			se ejecutaron más de 28 mil operativos antidrogas, mientras que de 
			2009 hasta lo que va de 2011, sobrepasaron los 34 mil.
			Además, con la presencia estadounidense en igual período se 
			incautaron más de 58 toneladas de cocaína, y desde su expulsión 
			hasta agosto de este año superaron las 78.
			En 2011 el gobierno incrementó el presupuesto destinado a la 
			lucha contra ese mal -ahora está fijado en 20 millones de dólares-, 
			lo cual ha coadyuvado a superar en siete meses las seis mil 
			hectáreas de cocales ilegales erradicados, en su mayoría en los 
			departamentos de Santa Cruz, Cochabamba, La Paz y Beni.
			Navarro confirmó que el Ejecutivo defiende la estrategia de la 
			responsabilidad compartida en esa lucha contra los estupefacientes, 
			pues Estados Unidos es el principal consumidor.
			También el combate a las drogas, dijo, se basa en una estrategia 
			soberana y autónoma, según ha definido desde 2006 el gobierno de Evo 
			Morales.
			Acerca de la detención en Chile y traslado hacia Estados Unidos 
			para su enjuiciamiento del general retirado René Sanabria, que 
			dirigía fuerzas antidrogas en Bolivia, aseveró que la DEA conocía de 
			su actividad mucho antes y nunca lo apresó o sometió a procesos 
			penales.
			En el informe anual de Obama al Congreso estadounidense se afirma 
			que el Gobierno de Bolivia ha "hallado de manera demostrable" en 
			cumplir sus obligaciones señaladas en los acuerdos antinarcóticos 
			internacionales durante los últimos 12 meses.
			Mientras, la representación de la Organización de las Naciones 
			Unidas Contra la Droga y el Delito (Onudd), reconoció que el 
			crecimiento de cocales ilegales en Bolivia es casi nulo y destacó 
			los esfuerzos en el enfrentamiento al narcotráfico.
			El gobierno ha insistido en que en 2010 erradicaron ocho mil 200 
			hectáreas, poco más de tres mil más que lo estableado por la Ley 
			1008 y los organismos internacionales como Naciones Unidas.