"Esos son nuestros principales escollos, además de Argentina y
algunos botes de Chile y Brasil. La meta es alta, buscar una presea
con cada una de las 13 embarcaciones. La estrategia con los 34
preseleccionados, en esta etapa de preparación especial está
diseñada en función de lograrlo", explicó el entrenador Gerardo
Utria, incorporado después de Beijing’08.
En los varones se concentran las mayores potencialidades y del 28
próximo al 4 de septiembre buscarán boletos para Londres’12 en el
Campeonato Mundial de Bled, Eslovenia, con visas en juego para los
11 mejores de cada modalidad y la presencia de "lo mejor de lo
mejor". En escena por Cuba estarán el single, el doble par de remos
cortos peso ligero, el cuatro par, el cuatro remos largos sin
timonel y el dos largos sin timonel.
"Tres sesiones diarias realizan los atletas, iniciando con cuatro
kilómetros de técnica en el agua, combinados con elementos
específicos de remo como trabajo sobre la capacidad, velocidad y
resistencia de la fuerza. Un segundo momento de físico, y los
ligeros —hasta 70 kg en el caso de los hombres y 60 las mujeres—
mayormente solo técnica y una tercera sesión de gimnasio y otras
cuestiones físicas, en dependencia del plan. En total son casi seis
horas con la importante correlación trabajo-descanso", ahondó Utria.
En ese sentido, bajo condiciones ideales los remeros luchan en el
simulador, equipo que les marca distancia recorrida, frecuencia
cardiaca, ritmo de paletadas y tiempo.
Justamente la resistencia, fuerza, estatura, combinadas con la
coordinación y acople, se cuentan entre las claves del éxito para
una tripulación de remeros, que al decir del comisionado nacional
Ángel Luis García, tarda entre ocho y diez años para adquirir
maestría deportiva. A eso responde el hecho de que 13 de los
posibles 26 agraciados para defender el reinado en la capital de
Jalisco, repiten de la edición de Río, encabezados por los capitanes
Yoennis Hernández y Yaima Velázquez.
Pero no todo es color de rosa: este año no han tenido lides de
nivel, aparte de los IV Juegos del ALBA, donde la presencia del aire
en la pista se sumó a la poca exigencia de los rivales para atentar
contra la realización de marcas óptimas. La escuadra, salvo raras
excepciones, carece de botes de última generación: por ejemplo, en
tierras auriverdes, tras el oro del cuatro par de remos cortos,
pesaron la embarcación y estaba casi siete kilogramos por encima de
lo reglamentado, ¿consecuencias? Disminución de los niveles de
flotabilidad y aumento de la fricción con el agua, fue toda una
hazaña concluir con oro.
En definitiva, de cara al Mundial ese bote tiene grandes opciones
de colarse en la final A con crono estimado entre 5:41 y 5:45 y
fracción. En seis meses juntos los progresos en materia de acople
han sido notorios. Para tener una idea baste decir que en Beijing’08
los australianos dominaron con 5:36.20 y los líderes en este 2011
andan frisando los 5:40.
¿Se dará el de 13-13 en Guadalajara? ¡A remar duro!