El representante ruso ante la Organización del Tratado del
Atlántico Norte (OTAN), Dmitri Rogozin, viajará a finales de este
mes a Estados Unidos para zanjas diferencias respecto al escudo
antimisil, informaron hoy fuentes oficiales.
Vamos a continuar el trabajo con nuestros socios de la OTAN para
dejar a un lado posiciones álgidas de ambas partes, incluido lo
referido al escudo antimisil, declaró el ministro ruso del Exterior,
Serguei Lavrov.
Esperábamos alcanzar un acuerdo al respecto en la cumbre del G-8
(siete países más industrializados y Rusia) en Francia, pero
nuestros socios norteamericanos no estaban preparados para ello,
declaró el jefe de la diplomacia rusa.
Rogozin declaró a la prensa rusa que en caso de un fracaso para
alcanzar un acuerdo sobre aspectos del escudo anticoheteril en
Europa, Rusia se verá obligada a desarrollar su propio sistema de
defensa o de respuesta a la amenaza a su componente disuasivo para
finales de 2011.
Las conversaciones entre Washington y Moscú sobre el escudo
antimisil continúan, pero se mantienen las divergencias bilaterales.
A finalizas de este mes, se efectuará una reunión en la ciudad
balneario rusa de Sochi del Consejo Rusia-OTAN al nivel de
representantes permanentes, a la cual se espera la asistencia de
Lavrov y del presidente Dmitri Medvedev.