La Amazonía brasileña perdió una extensión de 268 kilómetros
cuadrados de bosque tropical húmedo en mayo último, según
información del Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE),
divulgada este viernes.
Con ello, la deforestación en la mayor reserva selvática del
planeta aumentó en 144 por ciento, comparada con igual etapa del año
precedente, cuando la extensión de bosque perdida fue de 109,58
kilómetros cuadrados.
Sin embargo, la cifra registrada en mayo marca, igualmente, una
disminución respecto a los resultados revelados en abril por la
misma institución, período en que la Amazonía brasileña perdió 478
kilómetros cuadrados de vegetación.
Izabella Teixeira, ministra de Medio Ambiente, reconoció que si
bien el nuevo Código Forestal, en proceso de alistamiento por parte
del Parlamento, posibilita la explotación de la Amazonía, la
práctica de la deforestación ilegal s condenable.
Gran alarma causó en el mes recién concluido las noticias sobre
el notable incremento de la deforestación en mayo, principalmente en
la región del Mato Grosso, donde se fomentan programas agrícolas y
la ganadería.
Los datos acerca de la deforestación, recolectados por imágenes
satelitales, todavía no son lo suficientemente abarcadores, afirman
las autoridades.
En ocasiones, las coberturas de brumas y nubosidades dificultan
la visibilización de importantes áreas.
El gobierno brasileño desplegó en el estado amazónico de Pará un
operativo policial de protección que combatirá la depredación en esa
conflictiva zona del llamado Pulmón del planeta.
Además priorizará la seguridad de personas y familias de
ecologistas, amenazados de muerte por sicarios, reportó Prensa
Latina.