El gobierno surcoreano extenderá la investigación sobre el
enterramiento de tóxicos altamente contaminantes en territorio de
bases estadounidenses en este país, informó Prensa Latina.
Según el viceministro de Defensa, Lee Yong- ul, el procedimiento
incluye esta vez la instalación de Camp Page, en Chuncheon, además
de otras ubicadas en la capital y la provincia de Gyeonggi.
El escándalo alcanza otros niveles tras las denuncias de
veteranos estadounidenses, organizaciones sociales y
medioambientales, y del legislador Yoon Sang-hyun, del gobernante
Gran Partido Nacional.
En dicho proceso se ubican bases militares en Chilgok, Bucheon y
Seúl, donde está instalado el principal cuartel de Estados Unidos en
esta nación.
Medios periodísticos surcoreanos se hicieron eco de que la
ampliación de la investigación puede abarcar a la mayoría de las 93
bases militares de Estados Unidos en Surcorea, algunas de ellas
traspasadas a las autoridades locales.
Las denuncias al respecto se concentran en el hecho de que en la
década del 60 las tropas estadounidenses enterraron miles de galones
del agente naranja y del químico Monurón en los sitios mencionados,
y en la zona desmilitarizada junto a territorio de la República
Popular Democrática de Corea (RPDC).
Además, millones de litros del agente naranja fueron rociados en
territorio de Vietnam durante los bombardeos de Estados Unidos y
afectaron a no menos de cuatro millones de habitantes de ese país.
Los efectos al medio ambiente y a la salud humana de ese químico
y la dioxina abarcan malformaciones, distintos tipos de cáncer y
otras graves enfermedades, de acuerdo con estudios científicos
divulgados.