Ciudad Juárez se levantó contra la violencia y la injusticia a la
llegada de la Caravana por la Paz, encabezada por el poeta Javier
Sicilia, quien convocó hoy a la firma del pacto ciudadano para
México, informó Prensa Latina.
El epicentro del dolor, como llamó Sicilia a la urbe, los recibió
con ansiosos habitantes que se congregaron en las vías y
prácticamente hicieron detener la fila de vehículos coreando no
estamos solos, mientras que centenares de autos se unieron alrededor
de la caravana, reseña el diario El Universal.
En el deportivo Villas de Salvárcar, donde ocurrió hace un año y
medio la masacre de 16 jóvenes a quienes el gobierno federal señaló
como criminales, efectuaron el primer acto público en medio del cual
ocurrió el saludo de consuelo mutuo entre Sicilia y Luz María
Dávila, madre de dos de los asesinados.
También el Juárez violento estuvo presente en el recibimiento,
pues varios jovencitos con sus rostros tapados arremetieron contra
patrullas de la Policía Federal que custodiaban a la caravana e
insultaron a los recién llegados, relató el periódico Milenio.
El rotativo revela que algo similar ocurrió en Monterrey y
Torreón, y aseguró que usualmente estos menores son contratados por
los cárteles para bloquear avenidas y hacer marchas con el fin de
pedir la salida del Ejército de las plazas.
Aquí fue asesinada Marisela Escobedo Ortiz el 16 de diciembre de
2010 por exigir justicia en el feminicidio de su hija Rubí, reza en
una placa colocada por los caravanistas en la acera, casi a las
puertas del Palacio de Gobierno local, justo el lugar donde murió.
La refundación del estado mexicano mediante una reforma política,
donde los ciudadanos tengan poder frente a la clase gobernante, es
el reclamo principal del movimiento social encabezado por Sicilia.
El México con el que sueñan estos activistas podría revocar el
mandato del presidente de la República, gobernadores estatales,
secretarios de Estado; mientras que los diputados y senadores
corruptos podrían ser juzgados y serían posibles las candidaturas
ciudadanas.