Veneración por la música cubana

Pedro de la Hoz·

SANTIAGO DE CUBA.— La antesala de la jornada de cierre de Cubadisco 2011, que ha mantenido en vilo a los habitantes de esta ciudad, estuvo preñada de hechos de alta significación cultural y hondo impacto popular: la presentación de la colección Veneración, antología santiaguera, preparada por Bis Music; el recital con el que Eliades Ochoa anticipó el repertorio de su más reciente álbum, Un bolero para ti; la celebración del Premio de Honor concedido a la conga de Los Hoyos; y el concierto que reunió en el Parque Céspedes a Andy Montañez, Adalberto Álvarez y La Colmenita, preludiados por el septeto Son del Nene, en plan de gira nacional para promover el disco Mi deseo.

foto: Yander ZamoraAdalberto Álvarez y Andy Montañez

Con Veneración, avalado por uno de los Premios Especiales Cubadisco, los avezados productores Juan Manuel García y Eddy Cardoza, con el imprescindible apoyo en el terreno de Gonzalo González, revisaron exhaustivamente las ramas del tronco trovasonero de la urbe santiaguera y su entorno desde la segunda mitad del siglo XIX hasta nuestros días. Podían haber optado por rescatar grabaciones prexistentes, pero apostaron por solistas y agrupaciones plenamente vigentes. Al mismo tiempo decidieron refrescar piezas no tan difundidas de 39 autores, introducidos por una décima de Gabriel Soler dicha por el maestro Luis Carbonell.

Parte de ese resultado constituyó el eje central de una velada efectuada en la Sala Dolores. Muestras de la vitalidad del movimiento sonero se pudo apreciar en la sucesión que parte de la familia Valera Miranda a los jóvenes exponentes del corte de Azabache y Morena Son, sin obviar el aporte de José Aquiles con su estampa neotrovadoresca. Pero las aristas más conmovedoras fueron trazadas, sin lugar a dudas, por las voces del dúo Melodías Cubanas, Miguel Ángel Jústiz y la sensacional octogenaria Chelo Romero.

Ya en la Casa de la Trova, Eliades Ochoa sentó cátedra con su manera de afrontar el bolero, con acentos bravíos y vocación victrolera. Por la recepción del público que atestó el principal salón de la institución de la calle Heredia, se puede inferir el éxito del álbum grabado por la EGREM una vez situado en los circuitos comerciales.

Orlando Vistel, presidente del Instituto Cubano de la Música, y Ciro Benemelis, presidente de Cubadisco, entregaron el Premio de Honor Cubadisco a la Conga de Los Hoyos en la propia sede del foco cultural que esta anima en la calle Martí. Baluartes de la tradición conguera, sus ejecutantes llevan a esa expresión otras especies y géneros de la música cubana.

La jornada festiva subió de intensidad en el Parque Céspedes no más Adalberto rompió a sonar Santiaguera, de Rodulfo Vaillant, y alcanzó un punto climático cuando Andy Montañez, quien recibió la réplica del Monumento al Tres, de Alberto Lescay, se sumó a los cantantes de la orquesta para glosar las inspiraciones de otro de los éxitos del momento, Amor con hache, y luego, a dúo con Adalberto, interpretó El fiel trovador.

Y como a todas estas, los muchachos de La Colmenita, identificados con el repertorio del Caballero del Son por el montaje de Las nuevas aventuras de Elpidio Valdés, escalaron al escenario, se puede comprender el mayor disfrute de un público que ha seguido con fervor los avatares de Cubadisco 2011.

 

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