La Secretaría de Educación de Honduras anunció la suspensión de
unos cinco mil maestros que participaron en las protestas de marzo
contra la privatización de la enseñanza pública, informó Prensa
Latina.
De acuerdo con el secretario general de Educación, Aníbal
Delgado, los docentes incumplieron con un cuestionado decreto de
emergencia que los obliga a volver a las aulas.
La medida del Ejecutivo, firmada por el presidente Porfirio Lobo,
fue publicada en la Gaceta Oficial tras cinco semanas de continuas
manifestaciones con las cuales el magisterio se opuso a una Ley que
avala la privatización de la enseñanza y a las violaciones de los
derechos humanos en la nación centroamericana.
Pese a la presión ejercida por los educadores, la normativa fue
aprobada por el Congreso, y el gobierno respondió a las demandas del
gremio con la represión de las protestas.
La Corte Constitucional ya recibió varios recursos de amparo
contra la suspensión de 305 docentes el pasado 11 de abril.
El martes, cientos de estudiantes, campesinos, indígenas y
miembros del Frente Nacional de Resistencia Popular tomaron algunas
ciudades del país en apoyo a los maestros sancionados, pero las
protestas fueron disueltas por la policía.
La represión policial causó en marzo la muerte de una profesora y
ha dejado a decenas de personas heridas y detenidas.
Al respecto, analistas y dirigentes gremiales opinaron que el
anuncio de suspender a otros cinco mil docentes agravará la crisis y
alejará la posibilidad de diálogo con el gobierno.