Acciones que incluyen el desarrollo de la lombricultura y los
nutrientes necesarios para los cultivos, posibilitan mejoras en la
producción de flores en la provincia de Santiago de Cuba.
Actualmente unas 40 hectáreas con sistemas de riego están
sembradas de ese renglón, con el anhelo de satisfacer las crecientes
demandas.
El 60 por ciento de las necesidades se encuentran cubiertas, pero
hay un proyecto para fomentar el cultivo y mejorar su
comercialización, precisó Ángel Luis Mitchel, presidente de la
Asociación Cubana de Técnicos Agrícolas y Forestales (ACTAF) en el
territorio, reporta la AIN.
Explicó que con el proyecto, ya en proceso, sembrarán otras 36
hectáreas, siete de ellas en la Gran Piedra, donde por sus
condiciones climáticas idóneas pueden obtenerse variedades como el
ave del paraíso, lirio antorcha, anturios y orquídeas.
Asimismo se refirió al estudio de los precios y transportación de
las flores, con el objetivo de posibilitar su comercialización sin
trabas y que lleguen a la población con el máximo de calidad.
Cuba tiene una alta densidad en flora, lo que con una adecuada
tecnología permitiría cultivar además, crisantemos, dalias y rosas
propias de climas templados, según el sitio digital
www.guiacuba.info.
Otros tipos de flores muy demandadas por los santiagueros son las
rosas, margaritas, gladiolos, girasoles y azucenas, lo que exigirá
un mejor trabajo para incrementar los volúmenes actuales.
La provincia de Santiago de Cuba requiere para autoabastecerse
unas 130 hectáreas de esas plantaciones, y entre las prioridades
están la capacitación de los productores, la utilización eficiente
de los suelos y la incorporación de la mujer a esa labor.