Los manglares, primera formación vegetal costera en la Laguna de
Guanaroca, clasifica entre los mejores conservados de su tipo en
Cuba, resultado de un proyecto rehabilitador en la provincia de
Cienfuegos.
Blanca Nieves Mingues, técnica de la empresa provincial Flora y
Fauna, explicó a la AIN que este año plantarán 10 mil posturas de
mangle, para lo cual preparan los muros de sedimentos donde
depositar esas plántulas.
Mileydis Almaguer, iniciadora de este programa en 1995, indicó
que primero aplicaron siembra directa de semillas, pero no
sobrevivían por la acción depredadora del hombre y animales, así
como también por los efectos de la naturaleza.
Luego crearon viveros en lugares seguros, de donde extrajeron los
ejemplares que plantarían en los muros de sedimentos conformados a
la orilla de las costas, y con ello alcanzaron mejor supervivencia
de las posturas.
Carlos Rojas Sarría, director del área protegida Guanaroca,
recalcó que los manglares son barreras protectoras del resto de la
flora, tales como la manigua costera y el matorral seromorfo, a los
cuales preserva de los vientos, huracanes, salpicaduras y la propia
erosión.
También los mangles constituyen importante refugio para la fauna
endémica y migratoria, en especial las aves, además de los moluscos,
reptiles, e insectos, que habitan y encuentran su alimento entre la
tupida vegetación de costa.
Desde que comenzó el proyecto, la Laguna Guanaroca debió
enfrentar a siete huracanes que dañaron ejemplares de gran valía.
Con más de tres mil hectáreas, este sitio mezcla en su lecho las
aguas dulces del río Arimao con las saladas de la bahía de
Cienfuegos.