El gobierno boliviano promulgará en las próximas horas la Ley de
Desarrollo y Seguridad Fronteriza, que establece mecanismos para
erradicar el contrabando de combustibles subsidiados por el Estado,
reportó Prensa Latina.
En entrevista con medios nacionales de prensa, el ministro de
Hidrocarburos y Energía, José Luis Gutiérrez, añadió que la misma
también permitirá la expropiación de aquellos surtidores ubicados en
un radio de 50 kilómetros de las ciudades limítrofes, que no
extiendan facturas.
Gutiérrez destacó que existen 23 estaciones de servicio ubicadas
en diferentes localidades fronterizas y que sus propietarios están
dispuestos a negociar una transferencia voluntaria con Yacimientos
Petrolíferos Fiscales Bolivianos.
Según datos oficiales, sólo el 30 por ciento de las estaciones
privadas extienden factura a sus clientes, lo cual contradice las
normas tributarias vigentes en el país.
El contrabando de carburantes en Bolivia trae pérdidas económicas
anuales cercanas a los 150 millones de dólares, de acuerdo con
cifras extraoficiales.