LA HABANA. — Cuba desarrolla programas y estrategias para el
diagnóstico y tratamiento de la tuberculosis, una enfermedad que
constituye hoy la segunda causa de muerte en adultos en el mundo.
Se calcula que en 2015 unos 40 millones de personas padecerán la
afección, y que cerca de ocho millones morirán por la dolencia, algo
que se podría evitar si se toman las medidas necesarias, destacaron
especialistas del Ministerio de Salud Pública cubano (MINSAP) y del
Centro Nacional de Promoción y Educación para la Salud.
En este contexto, Cuba, con una tasa de prevalencia de siete por
cada 100 mil habitantes, trabaja por reducir aún más esta cifra,
manifestó el doctor Antonio Marrero, del MINSAP.
En la isla cada enfermo cuenta, es un asunto de carácter social,
y por esa razón la eliminación de este fenómeno de salud es posible
si toda la sociedad actúa contra la infección, no solo el Ministerio
de Salud, destacó el doctor Marrero.
Explicó también que la tuberculosis está asociada al sida, algo
que muchos llaman dúo mortal, pues la primera acelera la evolución
de la segunda. Ambas patologías están relacionadas con
inmunodeficiencias, agregó.
Por ello es vital el diagnóstico oportuno con el fin de cortar a
tiempo la cadena de transmisión de la enfermedad.
La nación cubana tiene un programa para el diagnóstico temprano,
el cual se realiza mediante baciloscopía, el examen y el cultivo de
esputo del paciente, a lo que hoy se le agrega la nueva herramienta
de la biología molecular, aseveró.
Cada 24 de marzo el planeta celebra el Día Mundial contra la
Tuberculosis, una jornada que patrocina a nivel global la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Unión Internacional
Contra la Tuberculosis y las Enfermedades Respiratorias (UICTER).
Para esta oportunidad se preparan campañas y estrategias de salud
encaminadas a reducir los niveles de infección y la mortalidad por
esta dolencia.