Miembros de las mayores tribus de Libia se unieron hoy a la
denominada Marcha Verde emprendida desde esta capital hacia Benghazi
por ciudadanos interesados en promover la reconciliación entre el
Gobierno y los rebeldes.
Banderas verdes libias, ramas de olivo y consignas a favor de la
unidad de los ciudadanos de este país por encima de diferencias
políticas, distinguen la movilización de los civiles que marcharán
hacia la segunda ciudad, convertida ahora en capital de los
opositores.
Los activistas se pronunciaron a favor de evitar la beligerancia
y, sobre todo, impedir que una situación de inestabilidad o
violencia incontrolable justifique la invasión militar de las
potencias occidentales que bombardean desde el aire desde hace cinco
días.
Según organizadores del recorrido, la iniciativa pacífica podría
tomar varios días pues habrá que completar un trayecto de unos mil
200 kilómetros hasta Benghazi, durante el cual se prevé se adhieran
habitantes de poblados y ciudades situadas a lo largo del camino.
La idea de la marcha, que toma su nombre del color de la bandera
oficial libia, fue del líder Muamar El Gadafi después que aviones y
barcos militares de la coalición internacional bombardearon
posiciones del Ejército regular impidiéndoles su avance hacia
Benghazi.
El propósito, según explicó la agencia oficial de noticias JANA,
es que haya un diálogo democrático y pacífico para solucionar la
confrontación y frustrar planes imperialistas, sobre todo de Estados
Unidos, Gran Bretaña y Francia, de apoderarse del petróleo.
Líderes y demás miembros de la tribu Warfalla negaron que el plan
de unirse a civiles llevando ramas de olivo a través de zonas donde
actualmente se registran combates sea una proeza propagandística, y
subrayaron que es un acto de lealtad a El Gadafi. Con más de un
millón de integrantes, la Warfalla está diseminada por todo Libia,
incluido el bastión rebelde de Benghazi, y ello le otorga un rol
clave para impedir divisiones y tener una participación activa en la
Marcha Verde hacia el oriente de la nación.
Activistas políticos advirtieron que ese clan tiene como meta
promover la reconciliación y evitar una partición de Libia al estilo
coreano que ya muchos comienzan a pensar pueda ser una pretensión
solapada de la coalición internacional bajo el amparo de la ONU.
En Libia, como en muchos otros Estados árabes, las tribus son
políticamente importantes para cualquier gobernante, como ocurre con
la Gadadfa, a la cual pertenece El Gadafi.
Dicha comunidad está aliada con la Megarha, más numerosa y cuyo
bastión es Sebha, en los límites del desierto de Sahara, y sus
miembros dominan la fuerza aérea y otras ramas de seguridad,
mientras la Tarhuna, otra gran tribu del occidente, también respalda
al gobierno.