GINEBRA, 22 de marzo.— Más de 1 000 millones de personas carecen de
acceso al agua, un problema que se agravará por el crecimiento de la
urbanización y la falta de infraestructura adecuada a esos cambios,
por lo que Naciones Unidas instó hoy, en una jornada llamada Agua
para las ciudades, a que los gobiernos reconozcan la verdadera
"naturaleza de la crisis".
En el día mundial de este recurso, la UNESCO advirtió que si no
se logra "convertir el agua en un instrumento para la paz, en un
futuro podría ser una importante causa de conflicto". La situación
más alarmante ocurre en la urbanización de los países en desarrollo,
ya que las ciudades crecen en un promedio de cinco millones de
habitantes al mes, según ANSA.
En los suburbios de esas naciones viven 828 millones de personas,
"que no tienen acceso al agua potable ni a servicios de saneamiento,
y la inestabilidad de sus viviendas las hace vulnerables a los
desastres relacionados con el agua y el medio ambiente, como las
inundaciones o los deslizamientos de tierras", afirma un reporte que
la ONU publicó hoy.
Las cifras reflejan que cuatro millones de personas mueren por el
consumo de agua en condiciones deficientes, de las que la mitad son
niños menores de cinco años, informó Europa Press.