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Al menos 15 personas murieron en Filipinas por las intensas
precipitaciones que afectan desde hace dos días el centro y sur del
país, las que han provocado inundaciones y deslizamientos de tierra.
De acuerdo con las autoridades locales, la isla Leyte, en la
región de Visayas, y la localidad de Tacloban, a unos 570 kilómetros
al sureste de esta capital, experimentaron fuertes aludes ante las
continuas lluvias reportadas en la zona.
La policía explicó que varias de las víctimas quedaron sepultadas
bajo el lodo, mientras otras fueron arrastradas por las riadas, lo
cual dificulta aún las labores de rescate.
Como medida preventiva, el Gobierno suspendió las actividades
escolares en esas áreas, luego que el Consejo Nacional para la
Reducción y Gestión de Riesgos de Desastres indicara que las lluvias
ocasionaron además el desbordamiento de algunos ríos en Bohol, Samar
y Mindanao.
La administración ordenó además la evacuación de miles de
residentes, 500 de ellos del municipio de Palo, Leyte.
En enero último 17 personas fallecieron y unas 400 mil,
procedentes de doce provincias, resultaron damnificadas por las
inundaciones y deslizamientos de tierra en el sur y el este de esta
nación, por lo que el Gobierno decretó estado de calamidad en
algunas zonas.