Los precios de los alimentos en Latinoamérica y el Caribe
subieron en enero a un ritmo menor al observado a escala mundial y
al que caracterizó a la crisis de 2007-2008, dijo hoy la FAO.
Según una nota difundida en La Habana por la Oficina de la
Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la
Alimentación (FAO), los mercados de la región amortiguaron el alza
de las cotizaciones de cereales y otros nutrientes, dijo PL.
Con ello evitaron un aumento mayor de la pobreza y el hambre,
sostuvo además el mensaje del organismo, cuya sede central está en
Roma.
En enero de 2011, los precios en 11 países de América Latina y el
Caribe que representan el 95 por ciento del Producto Interno Bruto
regional treparon menos que la tendencia observada a nivel mundial.
Continúan las presiones inflacionarias en el área debido
fundamentalmente a las alzas en las cotizaciones de la energía y los
alimentos, señaló la FAO.
Sin embargo, los precios no se transmiten de manera automática a
los países, y en enero su índice en el área mostró un crecimiento
moderado, comentó Alan Bojanic, Oficial a cargo de la oficina
regional, en Chile.
La revalorización de la tasa de cambio en muchos países ha
funcionado como un factor de amortiguación frente a los impactos
inflacionarios mundiales, como se constata en Brasil y Chile.
Lo anterior contribuye a explicar que la región no esté siguiendo
paso a paso los aumentos de los precios internacionales, sostuvo el
funcionario.
Bojanic alertó sobre la alta volatilidad de las cotizaciones y
comentó que la reducción experimentada en enero se da en un contexto
de alza de inflación durante los últimos 12 meses.