La prueba toxicológica y hepática a la que se sometió el
expresidente y candidato neoliberal Alejandro Toledo, para negar que
sea consumidor de drogas y alcohólico, genera críticas y dudas en
Perú, reporta Prensa Latina.
El postulante nacionalista Ollanta Humala calificó como payasada
la presentación por Toledo de certificados de exámenes con
resultados negativos, para lo cual era presionado por los aspirantes
Keiko Fujimori y Luis Castañeda, también neoliberales.
Humala criticó que Toledo haya mostrado los documentos en una
presentación, anoche, de los candidatos presidenciales, lo cual le
restó nivel al evento.
Recordó que cuando fue presidente Toledo negó a la adolescente
Zaraí, que decía ser su hija, pero también bajo presión acept
hacerse una prueba de ADN que confirmó su paternidad y tuvo que
reconocerla.
Humala había cuestionado el reclamo de los aspirantes porque
enfocaba la campaña electoral en asuntos intrascendentes, eludiendo
temas de fondo como la política económica neoliberal,
La candidata Fujimori consideró carente de transparencia y poco
confiable el examen de Toledo, y anotó que es extraño que lo haya
hecho en febrero y en forma privada, sin presencia de los medios de
comunicación.
El exalcalde de Lima Luis Castañeda expresó también desconfianza
y recordó que Toledo tiene antecedentes de faltar a la verdad en
forma permanente.
Sectores contrarios a Toledo lo acusan de vida disipada y
recuerdan que antes de ser gobernante estuvo envuelto en una
situación escandalosa en la que un análisis médico policial verificó
que había consumido drogas.
El secretario general del presidente Alan García, Luis Nava,
entregó a la prensa copias de facturas por la compra de más de 46
mil botellas de licor para el palacio de gobierno durante los cinco
años de gobierno de Toledo.
El expresidente negó la versión y dijo que era una maniobra en su
contra.