El gobernador de Florida, el republicano Rick Scott, derogó las
leyes estaduales que facilitaban el voto de exconvictos, quienes en
su mayoría apoyaron en 2008 al presidente Barack Obama, reporta la
prensa, reporta Prensa Latina.
El diario The Washington Post señala que Scott dio marcha atrás a
las medidas aprobadas hace cuatro años por su antecesor Charlie
Crist, considerado un republicano moderado.
Bajo las nuevas reglas, las personas convictas por delitos graves
deberán esperar siete años luego de cumplir sus condenas para
solicitar el restablecimiento de sus derechos civiles, incluido el
voto.
En 2007 Crist eliminó ese requisito, lo cual permitió a más de
100 mil personas ejercer el sufragio en las elecciones
presidenciales del siguiente año, recuerda el periódico.
Los expertos señalan que muchas de ellas eran afroamericanos que
se inclinan por los demócratas.
Los miembros de ese partido y grupos defensores de los derechos
civiles criticaron a la fiscal general del Estado, Pam Bondi, por
promulgar la normativa.
Según el Post, quienes cuestionan la ley advierten de la
importancia de Florida en los comicios presidenciales del próximo
año.
El objetivo de esa medida es claramente suprimir el voto cuando
entramos en el ciclo de una elección presidencial, señaló Howard
Simón, director de la Unión Estadounidense para las Libertades
Civiles en Florida.
Al respecto, el diario destaca que en muchos estados los
republicanos endurecen las leyes para votar con el argumento de
combatir el fraude, en medio de las críticas demócratas, quienes
consideran que el verdadero objetivo es restar apoyo en las urnas a
Obama.