AP indicó que los dos bandos libraron batallas con artillería y
cohetes a unos 20 kilómetros al oeste del puerto petrolero de Ras
Lanuf, el punto más occidental capturado por los rebeldes.
Fuerzas leales a Gaddafi recuperaron el control del centro de
Zawiyah y expulsaron a los rebeldes de su bastión en la principal
plaza de la ciudad, ubicada en el oeste de Libia.
El canal estatal libio mostró imágenes de seguidores de Gaddafi
que se dirigían hacia el centro de Zawiyah, que fue la ciudad bajo
control rebelde más cercana a Trípoli, según Reuters.
En tanto, los enviados de la UE describieron un panorama muy
alejado de los crímenes contra la humanidad por los que el Tribunal
Penal Internacional investiga a Gadafi por las denuncias de Estados
Unidos y sus aliados, indicó Telesur.
La misión —encargada por la jefa de la diplomacia europea,
Catherine Ashton— regresó a Bruselas e informó que la visita, que se
limitó a una parte de la ciudad, transcurrió sin incidentes y sin
registrar "ninguna amenaza".
Fuentes de la misión afirmaron que mostraron al Ministerio de
Exteriores libio su preocupación por la situación de los derechos
humanos en Libia, pero alegaron que no pueden tomar posición sobre
los responsables por las supuestas violaciones cometidas, pues no
cuentan con información de primera mano. Lo que se conoce, se ha
recogido a través de testimonios o de los medios de comunicación,
admitieron.
Sin embargo, el portavoz de la jefa de la diplomacia europea,
Michael Mann, aseguró que esa conclusión "nada cambia" la posición
de la UE sobre que "Gaddafi debe irse".
Por su parte, altos asesores del presidente estadounidense Barack
Obama se reunieron hoy para determinar qué medidas se pueden tomar
para presionar a Gaddafi, informó AP.
Se proponían examinar las consecuencias de imponer una zona de
veda de vuelos sobre Libia y otras posibles opciones militares,
dijeron funcionarios que hablaron con la condición del anonimato.
También la OTAN prepara para mañana una reunión de ministros de
Defensa aliados con vistas a crear una zona de exclusión de vuelo
sobre Libia, considerada por muchos como una declaración de guerra a
Gaddafi, informó PL.
En detrimento de una solución pacífica a la crisis en ese país
norafricano, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN)
opta por el lenguaje belicista e, incluso, intenta rearmar a los
sublevados.
Un vocero de la Casa Blanca señaló que Estados Unidos no excluye
la posibilidad de que la comunidad internacional abastezca en armas
a los rebeldes libios, reportó ANSA.
Según Jay Carrey, la resolución ya aprobada por el Consejo de
Seguridad de Naciones Unidas, que decreta un embargo en la venta de
armas a Libia tiene la flexibilidad necesaria para autorizar el
envío de armas a los rebeldes, si se asume una decisión de este
tipo.
Gaddafi, por su parte, concedió una entrevista a un canal turco,
en la que advirtió que su salida de Libia, demandada por la Unión
Europea y Estados Unidos, causaría inestabilidad al interior del
país y también a nivel mundial, publicó Reuters.
Al menos 13 personas murieron y más de 60 resultaron heridas en
las últimas horas en El Cairo en enfrentamientos separados entre
cristianos y musulmanes, y cientos de manifestantes atacados hoy en
la plaza Tahrir, dijo PL.
El movimiento Hermanos Musulmanes, la principal formación
opositora, acusó a partidarios del derrocado presidente Hosni
Mubarak de provocar los choques y desatar la violencia contra los
cristianos, acción que será repudiada en una movilización convocada
para el próximo viernes por varios partidos.
En Bareihn, los grupos opositores suníes y chiíes mantuvieron
este miércoles un encuentro con el fin de tratar de reducir la
tensión sectaria en aumento tras semanas de protestas contra el
Gobierno de la isla. La mayoría de los bahreiníes son chiíes pero el
país está gobernado por la familia Al Jalifa, que es suní.
Los manifestantes acampados en la plaza de la Perla, en Manama,
insisten en la unidad entre suníes y chiíes, tanto en los eslóganes
de sus protestas como en las pancartas que han desplegado.