Inspirado en los paisajes insulares y europeos, el pintor cubano
Abel Morejón recrea con sus pinceles el diálogo hombre-naturaleza,
en muros de ciudades alemanas, cuyos paisajes evocan estampas de su
tierra natal.
Siete murales creados por el artista realzan escenarios de
Paderborn y poblados cercanos, donde predominan los ambientes
bucólicos, similares a los escenarios campestres de esta occidental
provincia, reporta Prensa Latina.
Las vistas y atmósfera sosegadas de esas localidades me recuerdan
inevitablemente a Pinar del Río, por lo que en las obras confluyen
símbolos de ambos sitios, explicó a Prensa Latina.
Entre sus creaciones más recientes sobresale un mural de dos
metros de altura y 40 de ancho, situado en la estación central de
Paderborn, trabajo en el que participaron, además, 17 estudiantes.
Viaje por la naturaleza es el nombre del proyecto, que clama por
la preservación del entorno frente a los peligros del acelerado
cambio climático, agregó.
A esa experiencia le siguió una pintura de grandes dimensiones
realizada en la universidad local, en la cual convergen elementos
distintivos de la cultura cubana como la palma real (árbol nacional)
y el valle de Viñales, Paisaje Cultural de la Humanidad, junto a
íconos visuales de la ciudad, situada en el occidente de Alemania.
Mi sueño era hermanar con trazos y colores a las dos naciones,
expresó.
Luego de inaugurar varias exposiciones personales, Morejón
asegura que regresará a Paderborn, donde nace el río Pader, para
pintar otros muros con similares motivaciones artísticas.
Su primer viaje a Alemania ocurrió en el año 2000, auspiciado por
la organización (Farb-fieber) o fiebre de colores que contribuyó,
además, con la iniciativa de ambientar espacios abiertos de esta
urbe mediante el empleo de las técnicas del muralismo.