LAS TUNAS.— "Cuba demostró que el problema de la infancia no es
un asunto de recursos económicos, sino de voluntad política. Siendo
un país bloqueado y con escasos recursos, logró que la
implementación de los derechos de la niñez sea un modelo, con
indicadores que están entre los más altos del mundo".
En esos términos resumió José Juan Ortiz, representante de UNICEF
en Cuba, la apreciación que tiene el Fondo de Naciones Unidas para
la Infancia con respecto a la obra desarrollada por el Estado cubano
en torno a la niñez.
Al dialogar con representantes de la prensa tunera y medios
nacionales, José Juan Ortiz recalcó la prioridad que la Mayor de las
Antillas le ha concedido a la infancia desde enero de 1959,
traducida en "una obra fabulosa", sobre todo en terrenos como los de
la Salud (con índices de mortalidad infantil entre los más bajos del
mundo), Educación (mediante la escolarización de todas las niñas y
niños), además de garantizar amplio acceso a los derechos
instituidos para la infancia mediante la convención internacional
correspondiente.
Acerca de ese asunto, ponderó el hecho real de que para los
cubanos esa Convención tenga también un carácter de ley nacional y
no constituya solo un instrumento jurídico internacional.