El cable submarino de fibra óptica que enlaza a Cuba con
Venezuela tocó tierra ayer en la playa de Siboney, en la provincia
de Santiago de Cuba, a 14 kilómetros al este de su capital, ante la
presencia del Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez,
miembro del Buró Político y vicepresidente de los Consejos de Estado
y de Ministros; Medardo Díaz, ministro de la Informática y las
Comunicaciones; Hamadou Touré, secretario general de la Unión
Internacional de Telecomunicaciones y Manuel Fernández, viceministro
de Telecomunicaciones de Venezuela.
De acuerdo con reportes de PL, Wilfredo Morales, presidente de la
Empresa de Telecomunicaciones Gran Caribe, hizo un recuento de este
empeño integrador, iniciado en el 2007 por el presidente Hugo Chávez
con la creación de esa entidad mixta, y que tuvo un punto culminante
con la travesía de 19 días del barco francés Ille de Batz, que trajo
el cable a costas cubanas. Según la agencia de noticias venezolana
AVN, Morales indicó que el cronograma trazado para el traslado hacia
Cuba se cumplió.
Por su parte, Manuel Fernández resaltó el simbolismo de la
conexión física entre las dos naciones, que derriba siglos de
incomunicación y avanza en el camino de ambos gobiernos por la
integración y el desarrollo.
El Ministro cubano de la Informática y las Comunicaciones, opinó
que el cable submarino abre una brecha al bloqueo estadounidense
contra Cuba y robustece la soberanía nacional en las
telecomunicaciones. También informó que en las próximas 48 horas
continuará el tendido hacia Ocho Ríos, Jamaica, lo cual propiciará
la oportunidad de conectar ese país y otras naciones del área,
apuntó la AIN.
En el recibimiento participaron dirigentes y trabajadores del
sector de la Informática, vecinos del costero poblado e invitados.