La amenaza ugandesa de retirarse
de las misiones de Naciones Unidas, intensificó sus discrepancias
con organización mundial, la cual prevé difundir un informe que
acusa a militares de Uganda y Ruanda de violar derechos humanos en
la República Democrática del Congo (RDC).
El documento que se filtró a la prensa el pasado mes se refiere
al período de 1993 al 2003, tras el genocidio en Ruanda, que cobró
la vida de entre 800 mil y un millón de ciudadanos de conducta
política moderada, mayormente de la comunidad tutsi.
Ese genocidio sucedió al derribo del avión del presidente Juvenal
Habyarimana, quien junto con el gobernante burundés, Cyprien
Ntaryamira, regresaba a Kigali de una reunión en Arusha, Tanzania,
para establecer la paz con el guerrillero Frente Patriótico Ruandés
(FPR).
En el informe se responsabiliza a los ejércitos ruandés y ugandés
que operaron en el oriente de la RDC de crímenes de guerra y contra
la humanidad, además de masacrar a la comunidad hutu.
El ministro ugandés de Asuntos Exteriores, Sam Kutesa, condenó el
informe y lo consideró basado en rumores, y carente de pruebas.
Advirtió que ese texto podría amenazar el compromiso de Uganda de
participar en misiones regionales pacificadoras.
Una reacción de similar fue la ruandesa, que también amenazó con
abandonar las misiones de Naciones Unidas, como la que cumple en
Sudán.
Según la versión del texto los ejércitos de Uganda y Ruanda
cometieron los abusos cuando apoyaban a los rebeldes congoleños para
derrocar a Mobutu Sese Seko en 1997 y continuaron cuando ocuparon
partes del Congo Democrático.
Entre las acusaciones recogidas en el documento se incluyen
matanzas de civiles, tortura, y la destrucción de infraestructura
que condujo a muertes residentes en los lugares ocupados.
En su carta a Naciones Unidas, Kutesa dice que su país rechazó
tales declaraciones y acusa a los autores de confiar en la
información dada por partidos cuyos motivos son sospechosos, y
critica el defecto de no consultar a Kampala sobre los hechos.
"Tal táctica siniestra mina la resolución de Uganda de seguir
contribuyendo, y participar en varias operaciones regionales e
internacionales pacificadoras".
Por su parte, las autoridades ruandesas afirmaron que retirarán
sus tres mil 550 soldados de paz de la misión en Darfur, si la ONU
publica el documento.
Las tropas del FPR, ahora gobierno en Ruanda, apoyaron a las
guerrillas congoleñas de Laurent Desire Kabila contra Mobutu,
contienda que concluyó en 1998 con su derrocamiento.
Posteriormente se desató la denominada Primera Guerra Mundial
Africana, escenificada en la RDC, y en la cual combatieron Ruanda,
Burundi y Uganda, de un lado, y Zimbabwe, Namibia y Angola en el
otro, además otros países participaron indirectamente.
Según la ONU, el informe será publicado el viernes y aseguran que
en él se detallan crímenes nunca antes documentados.