SANTA
CLARA.— La experiencia de una familia santaclareña residente en el
Reparto José Martí demuestra, lo que con tanto énfasis se ha estado
insistiendo en materia de uso racional de la energía, que las
mayores posibilidades de ahorro están en el sector residencial.
Jesús Varela Santander y Beatriz González, miembros del CDR
número 4, Fabric Aguilar Noriega, de la zona 180, se tomaron en
serio la idea de economizar al máximo la electricidad, conscientes
de lo que significa esa decisión para su bolsillo y las arcas del
país.
La idea partió de José Antonio Vega, el coordinador de la Zona,
quien al calor de la campaña de ahorro, decidió invitar a un grupo
de especialistas de la Empresa Eléctrica a debatir el tema en la
cuadra.
La explicación resultó tan convincente que esa misma noche
comenté a Beatriz, mi esposa, que no podíamos seguir pagando 80 o 90
pesos todos los meses porque íbamos a la ruina, explica Jesús.
Al otro día comenzamos a pensar en implementar un grupo de
medidas que en poco tiempo comenzaron a rendir buenos dividendos.
Fíjate que actualmente estamos pagando entre 25 y 30 pesos, y quedan
algunas reservitas por ahí, expresa el trabajador de la Base de
Aseguramiento a la Industria de Materiales de la Construcción.
El problema no está en dejar de emplear los equipos, sino en
usarlos de manera eficiente, reconoce Beatriz, trabajadora de Planta
Mecánica, quien se ha revelado como una gran innovadora en el tema.
Nosotros tenemos los equipos eléctricos que pudiera tener cualquier
familia cubana, y todos los utilizo cuando lo necesito, pero sin
abusar, refiere.
Así, por ejemplo, jamás usted verá una bombilla encendida de
manera innecesaria, el planchado lo hago una sola vez a la semana,
al igual que el lavado, y cocino, siempre que se pueda, para varios
días.
En el caso del refrigerador, veo a algunas amas de casa
abriéndolo constantemente, yo en cambio aprovecho para sacar todos
los productos a utilizar a la vez, con el consiguiente ahorro de
energía.
Otro método muy efectivo, según Varela, es la lectura sistemática
del contador, lo que te permite tomar las decisiones a tiempo, y que
no te sorprenda el cobrador a fin de mes con una factura elevada.
A esas medidas, la familia adicionó la revisión de todos los
interruptores y tomas de la casa, descubriendo algunas fugas que
hasta ahora le estaban pasando la cuenta al bolsillo.
A Varela, Beatriz y Claudia, la hija, se van sumando otros
vecinos del Reparto José Martí quienes demuestran que, a la
vigilancia cederista, las donaciones de sangre y la recogida de
materia prima, los CDR pueden adicionar otra tarea no menos
importante, el ahorro de energía.