Caras largas mostraron los jugadores del campeón defensor España tras perder contra Lituania (73-76), en tanto Puerto Rico logró su primer triunfo y se mantiene con vida, durante la jornada de ayer del XVI Mundial Masculino de Baloncesto, en Turquía.

Los lituanos superaron en el último cuarto a los campeones mundiales.

El rival del monarca fue Lituania, un conjunto que venía de ganar sus dos cotejos anteriores y buscaba mantener su invicto. La derrota de España ante Francia el primer día —que al parecer no fue solo un tropezón— resultó para el entrenador lituano como una clase de orientación sobre cómo mover sus piezas, en busca de anular el perímetro de los españoles.

El director técnico ibérico, Sergio Scariolo, había dicho previo al encuentro que la defensa era la gasolina del equipo, pero esta falló en un último cuarto en el que permitió 23 puntos de Lituania, además del nulo aporte de su banquillo, desperdiciando así una ventaja de 18 tantos.

Linas Kleiza asumió nuevamente el liderazgo lituano con 17 puntos anotados, apoyado por sus compañeros Robertas Javtokas en los rebotes (ocho), y Mantas Kalnietis con cinco asistencias.

"Queremos asegurarnos la victoria sobre China", había expresado el base José Barea antes del decisivo choque que los mantendría con posibilidades de pasar a octavos; y no se equivocó Barea, quien ha asumido el papel protagónico en la ofensiva tras la lesión del estelar Carlos Arroyo. El elenco boricua obtuvo su primera victoria (84-76) frente a China —menos temible por la ausencia de su estrella Yao Ming—, en partido donde Ángel Vasallo anotó 22 puntos, Reinaldo Balkman bajó 13 rebotes y Barea repartió nueve asistencias.