Ahora ya tendrán el privilegio de contar, por segunda vez, con
una representante en el Mundial de Moscú, del 6 al 12 de septiembre.
¿La agraciada? La holguinera de 23 años Katherine Videaux, doble
subcampeona continental de los 63 kilogramos, quien al decir del
entrenador principal Rodolfo Alfonso se encuentra en óptimas
condiciones.
Katherine ha mejorado mucho, a su habitual fuerza y agresividad
se suma una mayor preparación técnico-táctica para enfrentar sus
combates, cuestión que demostró en la cita regional, sentenció su
mentor.
Retomando los inicios, para fraguar los primeros y sólidos pasos
de la naciente disciplina entre féminas, se decidió realizar una
alianza estratégica con jóvenes provenientes de los tatamis de judo.
Pudiera parecer alocado, pero la improvisación salió de maravillas.
El avezado profesor Ronaldo Veitía cedió un grupo de sus
muchachas, de las cuales seis viajaron hasta el Coliseo Chico de
Hierro sin pronóstico oficial, aunque llenas de ganas.
Parecerá increíble pero en tierras cafeteras se soltaron a
llavear y regresaron con ¡cuatro medallas! Yaritza Abel (división de
los 63 kilogramos) y Lisset Hechavarría, entonces (67), se bañaron
de oro; en plata quedó Sheila Espinosa (55); mientras la de bronce
correspondió a Yamilka del Valle (51).
Bien sólida la apertura si se tiene en cuenta que el estreno
ocurrió en los panamericanos del deporte (San Juan, Puerto Rico,
1997); Mundiales (Lorenskog, Noruega, 1987), y ya en el segundo,
Martigny, Suiza, 1989, hubo representantes de nuestro continente en
el podio: Estados Unidos y Venezuela, dos de las potencias del área,
junto a Canadá y las antillanas.