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Arenas Guane
En constante duelo contra el mosquito
RONALD SUÁREZ RIVAS
GUANE, Pinar del Río.— Enfrascada en un duelo a muerte contra el
mosquito Aedes aegypti, una industria pinareña contribuye
significativamente a evitar la propagación de enfermedades como el
dengue.
 
Los especialistas
calculan que al ritmo de explotación actual, la industria pinareña
podría respaldar la producción de Abatex durante otras tres décadas.
Comenzó a hacerlo de manera sostenida en el 2007 y, desde
entonces, los especialistas le atribuyen además la virtud de haberle
ahorrado a la economía cubana una fuerte suma de dinero; solo en el
2009 registró más 200 000 dólares.
Se trata de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Arenas Guane,
reconocida por sus yacimientos de arena sílice, donde se obtiene uno
de los componentes principales del Abatex, insecticida utilizado
para eliminar las larvas del mosquito en los depósitos de agua. En
la actualidad se producen unas 100 toneladas mensuales.
El ingeniero Noel Martínez, director de la planta, explica que la
arena sílice, formada a partir del cuarzo, tiene propiedades que le
permiten funcionar como inerte. "Es inodora e insípida y por tanto,
resulta apropiada para emplearla como ‘transportador’ de un químico
que va a actuar como larvicida".
"ARENA" DE OTRO COSTAL
A simple vista, el procedimiento parece sencillo: La arena se
extrae del yacimiento y se traslada hasta la planta, en la cual se
seleccionan los granos apropiados (deben tener entre uno y tres
milímetros de diámetro) de forma mecánica y se lavan con agua. Luego
pasan 45 minutos en el horno, sometidos a una temperatura próxima a
los 100 grados, donde se secan y a la vez se eliminan los agentes
patógenos.
"Como es un producto que se va a echar en el agua potable, tiene
que estar libre de impurezas. Cuando los análisis bacteriológicos
indican que está listo, se le entrega a un centro encargado de
elaborar el Abatex, en Ciudad de la Habana. Hasta ahora están
satisfechos con la calidad", explica Noel.
Sin embargo, para desarrollar esta producción, la planta,
diseñada hace casi 30 años con el objetivo de abastecer de arena
sílice a la industria del vidrio, con requerimientos diferentes, ha
debido ajustar su maquinaria a la nueva actividad.
"Desde el punto de vista de la granulometría, no teníamos
tecnología que nos permitiera asumirla, pero gracias a las
innovaciones realizadas por nuestros trabajadores, logramos
estabilizar una producción que nos beneficia económicamente y al
mismo tiempo evita importaciones", recuerda Noel.
Entre ellas se destacan las modificaciones realizadas al horno y
la recuperación de una zaranda mecánica, mediante la cual se
obtienen cinco clasificaciones diferentes de arena, posibilitando su
aprovechamiento en los filtros de los acueductos y la construcción,
entre otros.
"Anteriormente solo podíamos usarla en el vidrio o la fundición
de acero."
GARANTÍA DE LARGA VIDA
Después del colapso de la industria del vidrio en nuestro país en
la década de los 90 del pasado siglo debido a numerosas carencias
tecnológicas, esta empresa comenzó a buscar alternativas que le
permitieran mantener activas sus producciones. Este nuevo reglón
—que en la actualidad representa el 34% de sus ingresos—, ha
permitido a Arenas Guane mantener su rentabilidad y eficiencia.
Pero los beneficios económicos no se reducen a la planta.
"Tenemos entendido que antes de desarrollar esta producción aquí,
era preciso importar un componente similar, a un precio de 500
dólares la tonelada", afirma el director.
En cambio, el costo de elaboración en la industria pinareña es de
solo 225,74 pesos (de ellos 92,78 CUC).
"Si no existiéramos, para comprar en el exterior las 668
toneladas que produjo nuestra instalación en el 2009, el país habría
desembolsado unos 268 325 dólares adicionales", añade.
Sin problemas para cubrir las 100 toneladas mensuales que demanda
en la actualidad la elaboración del Abatex g1, destinado a los
depósitos de agua potable, y unas 40 por año del Abatex g2, un
compuesto similar, preparado a partir de un grano más grueso para
verter en presas y lagunas, la industria pinareña estaría en
condiciones incluso de incrementar la entrega si ello fuera preciso.
los especialistas estiman que al ritmo de explotación actual, los
yacimientos darían cobertura para seguir extrayendo durante otros 30
años una de las materias primas fundamentales para cortarle las alas
al mosquito transmisor del dengue. |