Un mes después de las elecciones parlamentarias en Renania del
Norte-Westfalia, el estado alemán con más habitantes carece todavía
este viernes de un nuevo gobierno por la falta de acuerdos entre
socialdemócratas, liberales y socialistas Die Linke, reporta Prensa
Latina.
El partido liberal (FDP) concluyó este viernes las negociaciones
con la agrupación Socialdemócrata (SPD), luego que éste
interrumpiera el diálogo con Die Linke (La Izquierda).
La repulsa del SPD de colaborar con Die Linke provocó fuertes
críticas de esta organización relativamente joven, fundada en 2007.
Quien habla con la gente en la calle, se da cuenta de la alta
indignación sobre la política de poder del SPD, que aparentemente no
es capaz de formar un nuevo gobierno, comentó Ralf Michalowsky, el
coordinador de Die Linke en el parlamento regional, con sede en
Düsseldorf.
Advirtió que nuevos comicios causarían costos superiores a los 45
millones de euros, pero en ese caso los resultados serían todavía
peores para la socialdemocracia en Renania, aseguró.
En una entrevista con Prensa Latina en Berlín, la vicepresidenta
del partido socialista, Sahra Wagenknecht, rechazó una colaboración
política con el SPD, mientras esa organiación política no cambie su
línea neoliberal, subrayó.
Nosotros no tenemos que participar en el gobierno de Renania,
dijo la funcionaria, quien pertenece a la plataforma comunista del
partido Die Linke.
El partido socialista agregó trabajará estrechamente con los
movimientos sociales para apoyar las protestas populares contra los
recortes, anunciados esta semana por el gobierno de la canciller
Angela Merkel.
La presidenta del SPD en Renania, Hannelore Kraft, buscó así una
llamada coalición formal de semáforo, conformada por el SPD (rojo),
el FDP (amarillo) y Los Verdes.
En las elecciones del pasado 9 de mayo, la Unión Democristiana
(CDU) de Merkel perdió casi 10 puntos y obtuvo el peor resultado de
su historia, con alrededor del 34 por ciento de los votos.
Una suerte parecida corrió el FDP, tras alcanzar 6,5 por ciento,
lo cual sacó a flote la crisis interna, causada principalmente por
el peor desempeño de sus representantes a nivel nacional.
A pesar de que el SPD retrocedió ligeramente con 34,5 por ciento,
se erigió en primera fuerza política en ese estado. Sin embargo, fue
el peor resultado de la socialdemocracia en Renania del Norte-Westfalia
en 56 años.
Los socialistas con 5,6 por ciento de los votos se afincaron como
quinto partido de mayor influencia en el territorio.