El presidente ruso, Dmitri Medvedev, compartió el optimismo de su
similar brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, en sus esfuerzos para
mediar en el diferendo en torno al programa nuclear iraní, reporta
Prensa Latina.
Medvedev concedió un 30 por ciento de posibilidades a las
gestiones que pretende realiza Lula da Silva para mediar en el
asunto del programa nuclear de Teherán, cuyo gobierno defiende en
todo momento su carácter pacífico.
Sin embargo, el mandatario ruso se pronunció porque la República
Islámica se dote de un programa atómico pacífico y verificable, en
un llamado directo a Teherán a colaborar con el Organismo
Internacional de Energía Atómica (OIEA).
En caso de ser imposible convencer a Irán de la necesidad de
colaborar con la OIEA, entonces será necesario dar una respuesta
como la estudiada por el sexteto para el diferendo iraní (China,
Rusia, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Alemania), declaró.
Moscú se pronuncia por sanciones inteligentes y rechaza la
aplicación de aquellas que puedan dañar a la población de la nación
persa.
El presidente ruso informó de su reciente intercambio telefónico
con su homólogo norteamericano, Barack Obama, sobre el particular.
Medvedev indicó que el sexteto esperará por la gestión del
presidente brasileño, quien viaja ahora a Irán.
Por su lado, Lula da Silva, quien arribó anoche a esta capital en
visita oficial, indicó en conferencia de prensa conjunta con
Medvedev que su país desea disfrutar por igual del fútbol y de la
paz en el mundo, por lo cual se propone llevar adelante su gestión.
Dijo que si su mediación no es exitosa, "al menos me sentiré
satisfecho de haber participado en el proceso de diálogo con Irán".