Elevar el índice de cobertura boscosa hasta el 45 por ciento de
la geografía del territorio para el año 2015, es propósito en la
provincia de Pinar del Río, la de mayor extensión arbórea a escala
nacional.
Al cierre de 2009, se reportó el 41,1 de superficie poblada de
árboles, basado en un conveniente programa de siembras y en la
sostenibilidad de la producción maderera, aspectos a favor del
crecimiento de los bosques, aun después de los huracanes Gustav e
Ike.
En páginas digitales de la prensa local, especialistas del
Ministerio de la Agricultura (MINAGRI) refieren el buen estado de
los viveros de posturas, del mantenimiento silvícola y de la
reforestación de las fajas hidrorreguladoras de los ríos, entre
otras, básicas para los propósitos de la provincia.
Documentos del MINAGRI a nivel central informan que mientras en
el mundo se pierden anualmente unos 17 millones de hectáreas de
arboledas, Cuba ha logrado cubrir hoy de árboles la cuarta parte de
su extensión, de apenas un 14 por ciento registrado en 1959.
Las propias fuentes destacan las proyecciones de llegar a 2015
con un área boscosa superior a los tres millones 200 mil hectáreas,
de cerca de dos millones 700 mil existentes en estos momentos.
Ello posibilitaría elevar hasta un 29,3 el patrimonio forestal
del país en relación con su superficie total, índice que se
considera adecuado para el nivel de desarrollo socio-económico, de
positivo impacto en la economía, el mejoramiento del régimen
lluvioso y la preservación del entorno.