SANTIAGO
DE CHILE, 8 de marzo. — La directora de la Oficina Nacional de
Emergencias (ONEMI) de Chile, Carmen Fernández, reconoció hoy que el
terremoto y tsunami que azotaron el mes pasado la zona centro-sur
del país, superaron las capacidades de respuesta del organismo
estatal, indicó Notimex.
En declaraciones a periodistas locales, la funcionaria —quien ha
recibido fuertes cuestionamientos por el accionar de la ONEMI y la
falta de coordinación para dar una alerta temprana de tsunami—,
admitió que la catástrofe del pasado 27 de febrero sobrepasó las
capacidades de la institución y "nos pilló anticipadamente" en medio
de un proceso de modernización del organismo.
Por otra parte, agrega AP, miles de chilenos viven en un
campamento improvisado en la barriada de Boca Sur, muy cerca del
centro de Concepción y a unos 500 kilómetros al sur de Santiago.
El Parque Ecuador es su nuevo hogar desde el mismo día del
terremoto, y se niegan a volver a sus hogares, algunos destruidos,
porque dicen que no llega el agua potable.
A las penurias propias del devastador seísmo, se sumaron las
ocasionadas por las lluvias de un fuerte temporal en las zonas
siniestradas.
La ministra de Vivienda, Patricia Poblete, estimó inicialmente
que hay 1,5 millones de hogares afectados, de los cuales 500 000
necesitarán muchas reparaciones para poder ser habitados o tendrán
que ser demolidos.
En un primer balance presentado este lunes, de un total
aproximado de 910 000 viviendas construidas por el estatal Servicio
de Vivienda y Urbanismo, 6 378 presentan daños mayores en sus
estructuras, especialmente a lo largo de seis regiones: Valparaíso,
Metropolitana, O'Higgins, Maule, Biobío y Araucania. "Otras 16 870
viviendas presentan daño menor", precisó el informe del Ministerio
de Vivienda.