Atractivas
muestras de arte cubano, norteamericano y griego ofrece el Museo
Nacional de Bellas Artes para este mes y el próximo.
Por lo pronto, continúa la exposición Un rasguño en la piedra,
que ofrece una dinámica del arte cubano entre los años 30 y 60 del
siglo XX vinculada con la obra del intelectual José Lezama Lima,
alguna de cuyas obras se reproducen por vez primera en un catálogo.
Una transgresora y polémica propuesta es Las cubanas son las
Barbies del Edén, proyecto de la fotógrafa norteamericana Jacqueline
Hayden y la cubana Lizette Vila, quienes muestran mujeres de muy
diversas profesiones y oficios, y especial sentido de la belleza.
Esta opción será abierta al público el 11 de marzo a las tres de
la tarde, como un diálogo armónico entre la diferencia y la forma
personal de asumir la identidad y la imagen que la naturaleza
proporcionó.
"Jorge Rigol, vanguardia y tradición" será inaugurada el 19 de
marzo, acerca de uno de los más importantes grabadores y dibujantes
nativos del siglo XX, su pertenencia a la vanguardia de los años 30
y un tránsito en su quehacer de más de tres décadas.
Una de las grandes atracciones del programa será El mundo minoico
micénico y la obra de Emile Gillierón e hijo, que por primera vez
ofrece en un conjunto originales y copias de primera calidad de
exponentes de una civilización esencial en la cultura de la
humanidad.
A todo este convite cultural se suma el proyecto Arte y moda
2010, del 13 al 18 de abril, con la inclusión de diseñadoras
austriacas, bolivianas e italianas, desfiles de modas, y un evento
teórico sobre el cuerpo ideal femenino en el siglo XX.