Las autoridades de Hanoi prevén un intenso trabajo en los tres pilares del proyecto comunitario: política y seguridad, económico, y cultural-social, comentaron fuentes de la cancillería local.

También esperan dar una contribución importante al acercamiento entre la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) y países de otras latitudes, así como a las organizaciones y foros mundiales.

Con la conducción de la alianza, integrada además por Tailandia, el presidente saliente, Filipinas, Malasia, Indonesia, Singapur, Myanmar, Brunei, Cambodia y Laos, el liderazgo vietnamita asume asimismo la responsabilidad de intensificar la colaboración interna y exterior para enfrentar los retos globales.

El futuro ente comunitario del sureste asiático tendrá una población de cerca de 600 millones de habitantes en 2015 y exhibe en el presente con un Producto Interno Bruto combinado de alrededor de 1,5 mil millones de dólares.

A juicio de Surin Pitsuwan, secretario general de la ASEAN, los países miembros del bloque confían en Vietnam.

El país indochino, dijo Surin, tiene una red amplia de amigos y alianzas en el mundo, lo que seguramente traerá beneficios para al ASEAN. Cada vez que se habla de la región del sureste asiático, los países se remiten a Vietnam.

Esta, agregó, es una nación con un crecimiento rápido y eficaces políticas de renovación, que atrae grandes inversiones de todas partes. Un presidente dinámico como Vietnam hará que el mundo preste más atención a ASEAN, estimó su secretario general.