El empleo de telas, cartones y otros materiales reciclados en la
conformación de pequeñas figuras que ejecutan juegos infantiles
cubanos, distingue la exposición de María Angélica Abarca.
En esta segunda muestra personal, ubicada en la Casa de la Ciudad
de la ciudad de Santa Clara, la joven creadora se inspira en el
texto de José Martí "Un juego Nuevo y Otros Viejos", de La Edad de
Oro, y logra personitas regordetas que practican cada uno de los
populares esparcimientos.
Antes de conformar un personaje estudio todos los detalles
relacionados con él, para que la silueta tenga personalidad propia,
y logre trasmitirla junto a su estado de ánimo, explicó a la AIN.
Las figuras, con más o menos nueve centímetros de altura, se
conjugan con los aditamentos propios de la diversión infantil como
son los papalotes, cachumbambé, hula hula, zancos, añadió.
Yeisis Ojeda Becerra, curadora de la exposición, comentó a la AIN
que asistir a la muestra, expuesta hasta el próximo día 23, es
adentrarse en un mundo fantástico, donde los sentimientos infantiles
se reflejan en los rostros de narices redondas y ojos conformados
con finas líneas.
En esta ocasión se expone uno de apenas cuatro centímetros de
alto que representa a Pilar, del poema martiano Los Zapaticos de
Rosa, la cual mueve al aire los rizos rubios atados bajo el sombrero
de plumas, concluyó la especialista.