Julio Cortázar, reconocido poeta y escritor argentino renace por
estos días en la revista Matanzas, publicada por la editorial de
igual nombre, que dedica su más reciente edición a homenajear al
autor de Rayuela.
El diseñador Johann E. Trujillo, ilustró el número con obras del
fotógrafo Nadal Antelmo y utilizó fotos de la Iconografía de Julio
Cortázar, publicada en 1986 por el Fondo de Cultura Económica de
México, y cuenta con artículos, poesía y testimonios relacionados
con la vida y obra de Cortázar.
Alfredo Zaldívar, editor de la publicación, seleccionó materiales
como un trabajo del ensayista argentino Claudio Martiniuk, autor de
un libro sobre el creador del personaje del cronopio, quien nació
hace 95 años y murió en París el 12 de febrero de 1984.
Entrevistas realizadas a Cortázar durante sus visitas a Cuba, un
comentario de Pablo Armando Fernández, Premio Nacional de
Literatura, una reseña de Cintio Vitier, y un acercamiento a la vida
social y revolucionaria del intelectual, a cargo de la escritora
Basilia Papastamatíu, completan la propuesta.
La revista Matanzas, también en sus secciones habituales de
narraciones y poesía, abarca textos de jóvenes creadores cubanos que
rinden homenaje a la figura de quien revolucionó las letras en el
continente americano por su manera de hilvanar sus cuentos cortos.
Cortázar escribió en París el reconocido poema Yo tuve un
hermano, cuando se enteró de la noticia de la muerte del guerrillero
Ernesto Che Guevara, a manos de la Agencia Central de Inteligencia
de los Estados Unidos, en Bolivia, en octubre de 1967.
Cuentan testigos que en su tumba en Montparnasse, París, es
costumbre dejar una copa o un vaso de vino y una hoja de papel o un
billete de metro (tren subterráneo) con una rayuela dibujada,
símbolos que lo eternizan.