.— Representantes del régimen de
facto y del presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya,
firmaron hoy un acuerdo para poner fin a la crisis política que
desató un golpe de Estado a fines de junio último.
El documento será puesto en manos del Congreso Nacional por una
comitiva de la Organización de Estados Americanos (OEA), insertada
en el proceso de negociación, pues fue necesario interceder ante la
negativa de los golpistas a entregar el poder.
Según lo convenido, corresponderá al Legislativo pronunciarse
acerca de la restitución o no del mandatario Zelaya, víctima de la
asonada castrense.
Uno de los dirigentes del Frente de Resistencia Nacional contra
el Golpe de Estado, Rafael Alegría, consideró este viernes que el
Congreso debería pronunciarse con rapidez, en cuanto reciba el texto
sucrito por los delegados de Zelaya y del gobernante de facto,
Roberto Micheletti.
Alegría dijo esperar que el Legislativo apruebe este fin de
semana la reposición del presidente, para evitar más sacrificios al
pueblo.
Numerosos ciudadanos están reunidos frente a la sede de ese
órgano estatal para exigir una solución pronta y definitiva al
conflicto.
En opinión de la Resistencia, el Parlamento no tiene más que
darle trámite inmediato a la restitución.
El sitio digital Vos el Soberano, creado para enfrentar a los
golpistas, alerta sobre la posibilidad de nuevo trámite dilatorio y
exhorta a los hondureños a reunirse frente a la sede del Congreso
para proseguir la resistencia pacífica.
Están latentes otras maniobras por parte del régimen de facto
como la solicitud de dictámenes a la Corte Suprema de Justicia y
otras instancias para demorar el retorno de Zelaya, alerta el medio
de prensa alternativo.