.— El Frente Nacional
contra el Golpe de Estado consideró hoy al diálogo como la vía para
resolver la crisis política en Honduras, aunque alertó sobre la
falta de un "ambiente propicio" para su realización.
El diálogo es un medio adecuado para solventar diferencias, pero
éste no es posible bajo las medidas de represión que ha adoptado la
dictadura, violentando garantías constitucionales y derechos humanos
fundamentales , advirtió el frente.
En un comunicado emitido en vísperas de la llegada al país de una
segunda misión de cancilleres de la OEA expuso la organización las
condiciones para la validez de cualquier conversación.
Mencionó entre ellas el cese del hostigamiento a la embajada de
Brasil en Tegucigalpa, donde se encuentra el presidente
constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, y la total derogación del
decreto del régimen que suspende las garantías individuales.
También es indispensable la inmediata libertad de los presos
políticos, el respeto a la libertad de expresión y la reapertura de
Radio Globo y el Canal 36 de la televisión, clausurados por el
régimen de facto.
Para el Frente, que agrupa a amplios sectores sociales, cualquier
solución a la crisis pasa por la salida del poder de la dictadura,
la restitución del presidente Zelaya y la definición de mecanismos
para la convocatoria a una Asamblea Constituyente.