QUITO,
5 de octubre.— "Ojalá la próxima oportunidad no pase todo lo
que ha tenido que pasar para sentarnos a dialogar, es demasiado el
costo que hemos pagado para estar aquí sentados", afirmó el
presidente de Ecuador, Rafael Correa, al iniciar las conversaciones
sostenidas este lunes con la Confederación de Nacionalidades
Indígenas (CONAIE).
Según reseña Telesur, el mandatario negó que la Ley de Aguas,
—que provocó una violenta protesta de las etnias indígenas
ecuatorianas con saldo de un civil muerto y 40 policías heridos—,
promueva la privatización del líquido vital, y añadió que el
documento legislativo fue discutido ampliamente por todos los
sectores sociales del país, entre los cuales se incluyeron
pobladores y dirigentes originarios.
Durante el diálogo, el jefe de Estado alertó a los líderes de la
CONAIE sobre las intenciones de algunos medios de prensa, que
"pretenden dividirnos luego de haber alcanzado una gran unión en la
creación de nuestra Constitución hace año y medio".
Asimismo, propuso la creación de una comisión conjunta, donde
participe un representante de la ONU, que investigue la muerte del
manifestante, ocurrida la semana pasada durante las protestas de
esta organización contra la Ley de Recursos Hidrológicos.