TEGUCIGALPA, 5 de octubre.— El presidente golpista de Honduras,
Roberto Micheletti, intenta evadir sus responsabilidades, al afirmar
este lunes que quienes sacaron del país, ilegalmente y por la
fuerza, al mandatario constitucional Manuel Zelaya, serán llevados
ante la justicia y castigados.
Según EFE, Micheletti —quien declaró hoy la restitución de las
libertades civiles— reiteró que "se cometió un error" al enviar a
Zelaya a Costa Rica después del golpe de Estado del 28 de junio.
"Definitivamente es una decisión que tomaron algunos sectores (a
los que no mencionó) y van a ser castigados de conformidad con la
ley", indicó en una rueda de prensa junto a la legisladora
norteamericana Ileana Ros-Lehtinen, quien llegó hoy a Honduras para
apoyar al gobierno golpista.
En una entrevista a la revista brasileña Veja, que comenzó a
circular ayer, Micheletti declaró que a Zelaya "los militares
deberían haberlo llevado a los tribunales, pero decidieron sacarlo
del país para evitar un derramamiento de sangre".
Por su parte, la congresista republicana Ross-Lehtinen prometió
gestionar apoyo al régimen de Micheletti y a las elecciones del 29
de noviembre próximo, agrega AFP.
Mientras, en las calles, la resistencia pacífica contra el golpe
militar entró en la jornada consecutiva número 100 y sus líderes
ratificaron que se mantendrá hasta la restitución del orden
constitucional y la reinstalación de Zelaya, señala PL.