.— La conmemoración hoy en 
			Honduras del día de la independencia nacional remarca el repudio de 
			la población al golpe militar que mantiene al país en aguda crisis 
			política, evalúa la prensa local.
			Un simbolismo especial concede el diario Tiempo a los actos que 
			tendrán lugar este martes en ocasión del aniversario 188 de la 
			liberación del colonialismo español; por un lado estarán el repudio 
			y la protesta de los ciudadanos, y por el otro la prepotencia y la 
			altanería de quienes usurpan el poder.
			El movimiento de resistencia nacional contra el golpe de Estado 
			desfilará masivamente en todos los departamentos, enfatizando su 
			exigencia de restaurar el orden constitucional; en tanto, el régimen 
			de facto mostrará el puño militar para recalcar su voluntad 
			dictatorial de no escuchar ni ceder al reclamo popular, indica el 
			editorial.
			La Antorcha de la Libertad, que habitualmente recorre 
			Centroamérica con motivo de los festejos por la independencia 
			regional, en esta oportunidad evitó su paso por el suelo hondureño 
			para condenar al régimen de facto, recuerda el periódico.
			A dos meses y medio de la asonada castrense, el aislamiento del 
			ilegal gobierno que encabeza Roberto Micheletti va siendo total en 
			lo político, en lo económico y en lo pertinente a la cooperación 
			internacional, valora el rotativo.
			Entre las expresiones del rechazo mundial se hallan los 
			pronunciamientos en contra de las próximas elecciones generales de 
			noviembre si para entonces se mantiene el actual quebrantamiento del 
			Estado de Derecho.
			Los comicios quedarán fuera de la cooperación internacional en 
			términos económicos, asistencia técnica y participación de 
			observadores, con lo cual perdería por completo el reconocimiento 
			mundial a la legalidad y legitimidad de sus resultados; por lo 
			tanto, la sucesión del régimen de facto nacería muerta sin remedio 
			ni compasión, indica Tiempo.
			De acuerdo con la publicación, el país vive un trágico panorama 
			que ni la celebración de la Independencia Nacional puede desvanecer, 
			dada la intolerancia y la brutalidad de un régimen espurio.