LAS
TUNAS. — La presencia un poco más notable de plátano en el mercado
territorial, deviene síntoma de la progresiva recuperación que
registra ese cultivo: el más afectado aquí tras el paso de los
huracanes Ike y Paloma a finales del pasado año.
Severos daños en más de 7 800 hectáreas (97% del área total
sembrada entonces de esa vianda) obligaron a los agricultores
tuneros a desencadenar acciones rápidas e intensas para garantizar
cosechas mediante cultivos de ciclo corto, e ir rescatando
gradualmente las plantaciones de banano.
Datos de la subdelegación correspondiente indican que hoy Las
Tunas tiene plantadas 7 018 hectáreas de ese cultivo: 87% de la
superficie sembrada antes de que azotaran ambos fenómenos
atmosféricos.
Sobre esa base, polos como el ubicado en el norteño municipio de
Jesús Menéndez están elevando sus primeros frutos, en tanto para el
último trimestre del año se pronostican sustanciales incrementos,
según estima Jorge Conde Álvarez, especialista de plátano y viandas
en la delegación provincial de la agricultura.
Entre tanto, las autoridades del Partido y del Gobierno en la
provincia insisten para que toda la producción sea acopiada a
tiempo, trasladada y distribuida en función de las crecientes
necesidades alimentarias.
Concebir y realizar ese proceso con la organización, previsión,
control y exigencia que se requiere, es lo más sensato para impedir
tardanza, pérdidas, desvío y otras irregularidades que afectan a la
población y abren espacio para que intermediarios y oportunistas se
impongan en cualquier esquina, con productos cosechados por el sudor
de otras manos y precios irreverentes para quienes viven
honradamente de su salario.