En plena campaña electoral, de cara a los comicios presidenciales de enero venidero, Timoshenko declaró a la agencia Interfax que su país planea sustituir el gas en parte con combustibles alternativos, incluido el carbón, con una importante producción nacional.

Antes de la crisis económica global, Ucrania consumía entre 69 y 75 mil millones de metros cúbicos anuales, 55 mil millones suministrados por el monopolio ruso Gazprom.

Para este año, Ucrania sólo comprará 35 mil millones de metros cúbicos a Gazprom, una cantidad suficiente a tenor con la reducción drástica de la demanda del consumo de gas y el modesto aumento de la producción de combustible a nivel nacional, explicó.

La empresa ucraniana Naftogaz y Gazprom firmaron un acuerdo en enero pasado, por el cual Kiev se compromete a comprar un volumen específico de gas y, en caso contrario, el contrato prevé la posibilidad de que Gazprom imponga multas por incumplimiento.

En el mes de enero de 2005 y en el de este año Moscú y Kiev escenificaron las llamadas guerras del gas, al acusar Rusia a Ucrania de negarse a pagar las deudas por los suministros y de desviar el combustible para necesidades internas.

Tal situación llevó a Gazprom a cortar totalmente el suministro de gas, tanto el de Ucrania como el que pasa por el gasoducto de esa vecina nación con destino a Europa occidental, todo ello en plena temporada invernal.