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La oposición venezolana debería rechazar la instalación de siete
bases militares estadounidenses en Colombia ante la amenaza
belicista que representan, instó hoy la coordinadora de Propaganda y
Comunicación del Partido Socialista Unido de Venezuela, Vanessa
Davies.
Una guerra a nuestro país sería contra los chavistas (seguidores
del presidente Hugo Chávez) y opositores, reflexionó Davies al
convocar al pueblo venezolano a movilizarse mañana en toda la nación
en contra de esos enclaves.
Llamamos a la paz, destacó, pues desde el lunes los socialistas
convocamos a manifestar el rechazo a esas bases en una caminata por
el centro de Caracas y luego la oposición instó a marchar por el
mismo lugar en contra de la recién promulgada ley de Educación.
Venezuela inició el pasado 28 de julio el proceso de congelar las
relaciones económicas con Colombia en respuesta a la amenaza que
significa para la región el convenio militar colombo-estadounidense.
Chávez calificó en días recientes de chantaje la acusación del
gobierno colombiano sobre el tema de las armas suecas que
supuestamente Venezuela habría suministrado a las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC).
Frente al peligro de guerra, el mandatario venezolano propuso el
pasado 7 de agosto la formación de bases por la paz en territorio
venezolano.
"Venezuela está a la orden. Si allá (en Colombia) abren siete,
acá abriremos 70 bases de paz para hablar, discutir, sobre la paz",
subrayó.
Instó a llevar esta idea hasta Bolivia, Ecuador y Brasil durante
un encuentro entre una comisión venezolana y representantes de la
organización Colombianos y Colombianas por la Paz en el Palacio de
Miraflores (sede del gobierno).
La víspera el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez,
informó que el gobierno venezolano canceló el acuerdo de suministro
de combustible a Colombia.
No vemos razones para renovar ese convenio cuya vigencia culminó
ayer (el martes), declaró a reporteros Ramírez.
Según el titular, "no estamos dispuestos a seguir subsidiando la
economía colombiana cuando de ese lado se toman decisiones sumamente
inamistosas hacia nuestro pueblo y nuestro país.
Chávez ordenó, el pasado 9 de agosto, el cese del suministro de
combustible a Colombia, y reiteró que mantiene "congeladas" las
relaciones con el gobierno de Uribe.