.— El candidato presidencial
Carlos H. Reyes y las bases del Partido Liberal opuestas al golpe de
Estado rechazaron la realización de elecciones en Honduras bajo el
gobierno de facto.
Esa postura coincide con la expuesta por el Frente Nacional
contra el golpe de Estado, que aglutina un vasto sector social en
demanda de la restitución del orden constitucional, desde la semana
anterior.
El Frente, en un pronunciamiento el pasado día 11, precisó que
incluso boicoteará los comicios del 29 de noviembre próximo, si el
derrocado presidente, Manuel Zelaya, es repuesto 15 días antes de la
votación.
En un comunicado, Reyes y sus colaboradores expresan que se
mantiene la candidatura presidencial independiente, pero propone que
los candidatos no golpistas a todo nivel de elección popular se
retiren del proceso electoral si se mantiene la dictadura.
Plantea también que el Frente se mantenga con su actual carácter
de lucha contra la dictadura y por una Asamblea Nacional
Constituyente y no se convierta en un frente político electoral.
No obstante, agrega que debe orientar a los ciudadanos, en su
oportunidad, a quienes debe elegir, señalando en cada municipio y
departamento a los candidatos no golpistas.
El dirigente de la Coordinadora Liberal contra el golpe de Estado
Rafael Barahona expuso anoche en el programa radial de la
organización su rechazo a la celebración de los comicios bajo las
condiciones de golpe militar.
Las bases liberales, que integran el Frente de resistencia
antigolpista, desconocieron como candidato presidencial a Elvin
Santos, a quien censuran su falta de pronunciamientos contra la
asonada militar.
En una reciente reunión nacional, más de cinco mil dirigentes
reconocieron el liderazgo de Zelaya y acordaron expulsar del partido
al presidente del gobierno de facto, el empresario Roberto
Micheletti.
El candidato del Partido Unificación Democrática (UD), el
diputado César Ham, defendió el pasado día 11 la necesidad de crear
un frente común o amplio de las fuerzas populares para enfrentar los
comicios.
Ham incluso aceptó la posibilidad de renunciar a sus aspiraciones
a favor de ese objetivo, en un acto cerca de la Casa Presidencial,
durante una marcha del Frente, del cual UD forma parte, que movilizó
a decenas de miles de personas.
La campaña electoral comienza formalmente el próximo día 29, en
un país controlado por dos partidos tradicionales, el Nacional y
Liberal, cuyos candidatos son rechazados por el movimiento popular
como golpistas.